‘La chica que vivió dos veces’
El escritor sueco David Lagercrantz ha presentado ‘La chica que vivió dos veces’ (Destino), el sexto libro de la saga Millenium que cierra la serie con una “crítica más fuerte a la ciberdelincuencia”. Así lo ha explicado en rueda de prensa en Madrid el autor, que afirma que también es un reproche a una “sociedad imbuida en las campañas de desinformación y de odio orquestadas por Estados y organizaciones con intereses políticos.
Para el también periodista, que ha presentado la novela en la sede de la Unidad de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional en Madrid y es el responsable de los últimos tres libros de la saga comenzada en 2005 Stieg Larsson, la última entrega hace honor a “la perspectiva crítica de la sociedad” de su creador.
“Ya vivimos en una sociedad marcada por odios, intolerancias y racismos que amenazan nuestra democracia y lo peor es que esas campañas digitales no solo son orquestadas en sótanos clandestinos por adolescentes ‘hackers’ sino que son métodos explotados por Estados y organizaciones con intereses políticos”, ha indicado.
En este sentido, considera que el libro, cuya protagonista vuelve a ser la ‘hacker’ e icono femenino del cine y la literatura Lisbeth Salander, “plantea que cuando las mentiras se extienden son peligrosísimas y abren el camino a la violencia real”.
“Muchos de los problemas que tenemos hoy en día tienen su origen en ese tipo de campañas de desinformación y de odio gestadas digitalmente por líderes autoritarios o poco escrupulosos, por nacionalismos y populismos que explotan técnicas muy sofisticadas para polarizar y fragmentar la sociedad, y es un deber denunciarlo”, ha subrayado el autor.
En este sentido, ha explicado que los fanáticos de la serie podrán ver a Salander en una “batalla final contra su hermana Camilla”, al tiempo que “desarrolla temas de actualidad social”. “El thriller es la mejor herramienta para presentar temas políticos y sociales, porque presentas un misterio o un crimen por resolver desde el que se desglosan una serie de asuntos interesantes”, ha dicho Lagercrantz, quien ha confesado sentirse “liberado” tras una “presión muy fuerte” durante la escritura.
“Estaba destrozado, pienso que he sobrevivido sin demasiadas consecuencias de salud, aparte de estar un poco más neurótico de lo habitual, pero sí es cierto que la gente se volvió loca al saber que continuaba la saga. Éramos portada de todos los periódicos a pesar de que había noticias más importantes como la guerra en Siria o los refugiados. Sentía que los críticos y fanáticos estaban afilando los cuchillos para clavármelos si algo no les gustaba”, ha dicho el autor, que ha agradecido a los admiradores de la saga su “confianza”.
MÚLTIPLES ‘HACKEOS’
También ha explicado que los días previos al lanzamiento de la novela fueron “desconcertantes” pues recibieron cientos de amenazas y ataques ‘hackers’ para intentar obtener una copia del tomo.
“Nos llegaron muchos correos de agencias y prensa interesada en tener el libro anticipadamente y resulta que eran ‘hackers’, lo cual es una muestra de que debemos dejar los teléfonos a un lado a veces y tener más seguridad, porque nos pueden estar vigilando o quieren obtener algo de nosotros”, ha dicho Lagercrantz.
La editora de Ficción Internacional de Planeta, Míriam Vall, ha apostillado que esta ha sido “la primera vez” que han tenido que esconder el manuscrito “bajo llave”, ante las intenciones de hacerse con él de algunos fanáticos.
En relación a este asunto, Lagercrantz ha bromeado sobre “lo poco digital” que es. “Una vez un amigo hacker me reprendió porque no usaba mucha seguridad en mi ordenador y porque no había tapado la cámara del ordenador con una cinta. Son cosas que ahora pienso que hay que tener en cuenta porque hoy en día exponemos nuestras vidas en Internet”, afirma.
Por su parte, el portavoz de Unidad Central de Ciberdelincuencia, Pedro Pacheco, ha manifestado su sorpresa por el hecho de que la serie sea víctima de uno de los temas que trata. “Hay un cambio de paradigma en los temas de ciberdelincuencia y parece que sí se está normalizando, se ve mucho más en temas cotidianos como este tipo de ‘hackeo’, que pudo haber sido por motivos económicos, para copiar y vender el libro, o puede ser por temas de odio o simplemente por el placer que les causa romper un sistema”, ha indicado.
En esta línea, Pacheco ha agregado que la mayoría de los casos de ciberdelincuencia son llevados a cabo por hombres, normalmente ingenieros o profesionales, a excepción de algunos casos puntuales hechos por mujeres.
“Entonces parece que por ahora Lisbeth Salander es la única gran ‘hacker’ mujer del mundo”, ha bromeado Lagercrantz. El autor se prepara para escribir otros proyectos personales alejados de la protagonista también conocida como Wasp en el mundo virtual y del personaje de Mikael Blomkvist, que hicieron famosa la saga hace 14 años.