La matraca de la moción de censura

Por: El Vigía

El PSOE está obsesionado con Madrid. No termina de aceptar que la Comunidad y el Ayuntamiento estén dirigidos por el PP y por ello amenaza con una moción de censura contra Isabel Díaz Ayuso aun sabiendo que no es el tema que preocupa hoy por hoy a los madrileños y que, además, no tiene posibilidad de prosperar porque la coalición PP-Ciudadanos es sólida.

El portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, ha aprovechado el debate del estado de la región en la Asamblea de Madrid para abrir la puerta a la presentación de la moción de censura. Argumenta para ello que el Gobierno de coalición que preside Ayuso es “fallido e inconsistente” porque, a su juicio, “no ha hecho nada relevante y mucho menos transformar o regenerar la Comunidad”.

Los argumentos del portavoz socialista son muy endebles y poco creíbles. Lo que sí traslucen es su afán de poder, siguiendo los pasos de su jefe Pedro Sánchez, al que su jugada sí le salió bien hace dos años. En el año transcurrido desde la formación de Gobierno tras las elecciones autonómicas de 2019, Ayuso está cumpliendo su programa político, que tiene puesto su foco en los intereses de los madrileños. Ayer mismo defendía en su intervención en el debate de política general su intención de rebajar medio punto en todos los tramos del IRPF, además de trabajar por la recuperación económica y la creación de empleo, tan dañadas por las medidas adoptadas por el Gobierno de Sánchez e Iglesias, como el tan nefasto confinamiento de tres meses, auténtica puntilla de la economía y de millones de familias.

Si el PSOE cree que hay motivos para censurar a Ayuso en Madrid, ¿qué habría que hacer entonces con Sánchez, que ha arruinado a España, líder en caída de la economía y en desempleo, además de encabezar desgraciadamente el número de muertos por la pandemia del Covid? Gabilondo sabe que no va a conseguir nada con la matraca de la moción de censura. Quizá debería centrarse en arrimar el hombro para que Madrid siga siendo la locomotora de España, además de reforzar la lucha contra el coronavirus, igual que reclama el Gobierno de Sánchez a Casado.