Volkswagen T-Cross
Nuevo todocamino
El T-Cross, que llegará al mercado en la primavera de 2019, completa la ofensiva SUV del fabricante, tras el lanzamiento del Touareg, su buque insignia. Este modelo es el todocamino más pequeño de la marca, con una longitud de 4,11 metros y una altura de 1,56 metros, y se caracteriza por su frontal y la amplia parrilla del radiador con los faros integrados.
A pesar de su menor longitud, cuenta con cuatro grandes puertas y un habitáculo amplio para hasta cinco personas. Además, gracias al asiento trasero abatible, el T-Cross permite más de 1.280 litros de volumen de almacenamiento.
El modelo puede personalizarse con tres acabados deportivos: ‘edition’, ‘advance’ y ‘sport’. En su interior, el T-Cross cuenta con iluminación ambiental indirecta –desde el acabado ‘advance’– y los salpicaderos coinciden en color y estructura con los materiales del asiento, el volante, la consola central pintada y los colores exteriores.
Asimismo, este SUV está disponible con tres opciones de motor. Los dos motores de gasolina de tres cilindros 1.0 litros TSI con filtro de partículas generan una potencia de 95 o 115 caballos. La oferta se completa con un cuatro cilindros 1.6 litros TDI con 95 caballos.
En función del propulsor, el T-Cross cuenta con una caja de cambios manual de cinco o seis velocidades o un cambio de doble embrague de siete marchas.
En cuanto a la tecnología, el T-Cross está equipado con varios sistemas de asistencia al conductor, entre los que destacan el de vigilancia ‘Front Assist’ –que viene de serie–, la detección de peatones, la frenada de emergencia en ciudad, el arranque en pendiente y la detección de fatiga, entre otras. Por último, entre las características opcionales se incluyen el asistente de luz de carrera y el aparcamiento asistido.