‘Hambre’, nuevo single de Kiko Veneno

Kiko Veneno estrena su nuevo single “Hambre” el 30 de octubre.

Kiko Veneno vuelve con material fresco. Lo hace después del muy exitoso “Sombrero roto” (2019), que llegó a lo más alto de la mayoría de listas de lo mejor del año, obteniendo entre otros el reconocimiento de Rockdelux como mejor álbum nacional del 2019 y recientemente galardonado como álbum del año en los Premios MIN.

El nuevo single de Kiko, “Hambre”, es el avance del que será su próximo disco, que también se titulará así y va a ser la continuación (o segunda parte) de “Sombrero roto”. Porque algunas de las canciones del álbum “Hambre” salieron en la misma hornada y porque persisten la ganas de percutir con un sonido sorprendente y vibrante.

Ciñéndonos al single “Hambre”, sus primeras estrofas llegaron a la cabeza de Kiko durante su participación en la edición 2019 de la gala solidaria “Lucha de Gigantes”.

En su letra, Veneno nos habla del hambre, como gran problema, pero también da a entender muchas otras cosas. Como el flamenco, que se vislumbra entre sonidos actuales, van intuyéndose otros sentidos de los versos.

Aparece el hambre como deseo, o esa otra hambre de la que ya nos hablaba Bob Dylan: el hambre por conocer lo ignoto, el hambre de investigar y de expresarse… Ese apetito de los humanos que es infinito.

El single “Hambre”, que se publica el próximo 30 de octubre, vendrá acompañado de un audaz videoclip, concebido y creado por Akimoski, Miguel Rey y Carmela Alvarado, un grupo creado ex profeso para la guerrilla creativa.

En el clip destaca el potente baile de una estrella emergente: la genial Yinka Esi Graves, inglesa de origen africano que se mueve como si fuera la misma diosa del hambre.

El vídeo representa, fusionando baile contemporáneo y flamenco, y en palabras de Kiko, “esa hambre que no deja entender la historia, ni comprender el presente, que es una enfermedad, ni cómo se gobierna el mundo o por qué mientras me baño en el mar llegan pateras y los africanos huyen saltando por encima de mis toallas. El futuro ya ni te cuento, ¿cómo voy a prever el futuro sabiendo tan poco del pasado y del presente? Lo único que me aterra es parar de comer. Quiero comer”.