AKIRA 1

Autor: Katsuhiro Otomo

NORMA EDITORIAL PRESENTA EL CLÁSICO DE KATSUHIRO OTOMO EN SU EDICIÓN ORIGINAL

En la hostil y caótica megalópolis de Neo Tokyo, la vida de Tetsuo y sus compañeros cambiará para siempre al verse envueltos en el enigma de Akira y el terrible secreto que esconde. La edición definitiva de una obra maestra del cómic japonés -y también mundial- que no debe faltar en la estantería de cualquier aficionado al cómic en general.

La historia se desarrolla en el año 2019 en Neo-Tokio, una ciudad reconstruida tras sufrir los devastadores efectos de una presunta explosión nuclear que desencadena la tercera guerra mundial. El gobierno ejerce un control represivo sobre la ciudad y experimenta sobre unos niños con poderes psíquicos latentes, aplicándoles fármacos para potenciarlos, estos contribuyen con predicciones para mantener la paz. Kaneda y Tetsuo son miembros de una pandilla de motociclistas llamada “The capsules” que tienen entre otras aficiones participar en peleas callejeras contra otras bandas, enfrentándose continuamente contra otra pandilla llamada “The clowns” montados sobre potentes motos.

Tetsuo sufre un accidente causado por un extraño niño con aspecto de anciano. A partir de ese accidente, Tetsuo no vuelve a ser el mismo. El gobierno lo secuestra, y en un análisis descubren que su potencial psíquico es uno de los más grandes que hayan detectado, comparable al de un sujeto extraordinario reclutado tiempo atrás. Empiezan a experimentar con él y éste comienza a desarrollar poderes psíquicos rápidamente, los cuales exacerban sus miedos y frustraciones, transformando patológicamente su personalidad.

Katsuhiro Otomo, nacido en en Hasama, en la prefectura de Miyagi, el 14 de abril de 1954 vivió su juventud durante una convulsa década de los 60, período en el que la convulsión y las protestas sociales estaban a la orden del día en Japón. Esta situación caótica fue clave a la hora de inspirar al autor en la creación de su obra más conocida, “Akira”. Pero sus influencias no acaban ahí: la animación de los estudios japoneses de ese período junto con las películas estadounidenses encauzaron su naturaleza rebelde, ya que “Mi vida es mi vida” e “Easy Rider” le sirvieron para dar forma al personaje de Shotaro Kaneda y su banda de problemáticos y rebeldes motoristas en “Akira”. Aparte de sobresalir por obras como esta, también destaca su papel no solo como mangaka, sino como director cinematográfico y de guionista.