Filosofía: quién la necesita

Vuelve la colección AYN RAND con la publicación de ‘Filosofía: quién la necesita’ (Ediciones Deusto), las raíces filosóficas de una de las grandes pensadoras del siglo XX

En estos ensayos inéditos en castellano, que Ayn Rand escribió en los años posteriores a la publicación de La rebelión de Atlas, la novelista y filósofa encaró la raíz de algunas de sus principales preocupaciones: el poder para cambiar las cosas, la distinción entre el egoísmo racional y el ego caprichoso, la censura o la distinción entre el mundo natural y los logros construidos por el hombre.

La filosofía no es un pasatiempo para adolescentes taciturnos ni para intelectuales que viven en su torre de marfil. Es una disciplina que aborda las cuestiones más importantes de la vida humana. ¿Cómo queremos que sea el mundo en el que vivimos? ¿Cómo podemos distinguir el conocimiento del engaño? ¿Qué es bueno y qué es malo?

En Filosofía: quién la necesita, Rand muestra cómo las ideas abstractas tienen consecuencias profundas en la vida real y examina algunas cuestiones que siguen de máxima actualidad: la relación entre el igualitarismo y la inflación, entre el colectivismo y la regulación de la pornografía o el consumo de alcohol, o el problema del libre albedrío frente al determinismo.

Con una mezcla de erudición y provocación, de perspicacia y generosidad vital, este libro permite conocer las fuentes intelectuales de la obra de Rand, la escritora que, hoy más que nunca, permite entender las grandes luchas que enfrentan a los individuos con los enemigos de la libertad.

 

 

Ayn Rand: (San Petersburgo, 1905; Nueva York, 1982) fue una escritora y filósofa nacida en Rusia y nacionalizada estadounidense. Tras publicar sus dos primeras novelas, Los que vivimos (1936) e Himno (1938), el éxito le llegó con El manantial (1943) y La rebelión de Atlas (1957), su obra cumbre.

Su legado continúa siendo enormemente influyente entre conservadores y libertarios, tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo, porque choca de frente contra la inercia cultural adquirida, cuestionando el eje «misticismo-altruismo-colectivismo» y sustituyéndolo por una filosofía basada en: «razón-egoísmo-capitalismo».